Veronik Liberal

Veronik Liberal

martes, 22 de septiembre de 2015

Me siento dentro del juego

Hoy haré una excepción. Lo siguiente que escribo no es un relato erótico, es un punto de vista de una chica sola que frecuenta el mundo liberal, buscando conocer parejas. Quizás el crear una complicidad con una pareja que conocí  hace unos meses me inspiró :

Los nervios previos que siento para quedar con una pareja hacen crecer mi tensión.
Si es con una pareja que voy a conocer, mucha más.
Normalmente, suelo aceptar la iniciativa de la pareja, el conocerse no compromete a nada. Pero si tengo que denegarla por algún motivo, lo hago sin miedo, pero con educación y respeto si así fue el mensaje de la otra parte.
Por ser chica no tengo que aceptar todo, mi decisión importa, el interés tiene que ser mutuo. Yo también puedo tomar la iniciativa, y que la otra parte no acepte.
Y otra opción que a veces ocurre, no es necesario que alguien me busque los contactos, yo me basto.
Importa como ‘entrar’ a una chica (y a las parejas y a los chicos.-Pero ahora estoy hablando de mí-). Las formas importan, y mucho.
El contacto previo por una página web de temática liberal me ayuda a desenvolverme mejor después en persona. Estando en un local liberal me cuesta mogollón acercarme a una pareja que no conozco para querer iniciar un posible acercamiento. Aunque reconozco que la mayoría de las veces me he relacionado en los locales, los contactos en común facilitan un poco el acercamiento, y antes me desenvolvía mejor.
Me ‘llama’ el conocer parejas. Ver que tal nos desenvolvemos, si hay naturalidad, si hay esa sensación que se llama ‘feeling’ (porque me la tengo encontrada con muchas parejas desde mis inicios en el mundillo, llevo varios años) y si nos gustamos físicamente.
Para mí, no es primordial el físico, pero si influye en todo el conjunto de la persona, y en este caso de dos personas, una pareja.
Si se da esa naturalidad, ese feeling, si coinciden los gustos…si algo surge, surgirá solo y con mucho más placer que no os podéis imaginar.
Las sonrisas son más, y más distendidas
Las bromas son más, y más picaronas
Las charlas serán más largas, y más diversas.
Las miradas será más, y más directas a los ojos o insinuantes.
A medida que voy conociendo a una pareja, tengo menos nervios (aunque alguna siempre quedará) y más complicidad, saco a relucir más cualidades mías e intento dar juego.
Me gusta el flirteo. Hace el encuentro, aparte de natural, insinuante, sensual… Todo ello si ligado a un momento ligeramente íntimo con vestimenta sensual, sexy, lo hace más provocador, divertido y con muchas más ganas de más.
Me siento dentro del juego, porque ellos quisieron y yo también. Hay muchas maneras de pasarlo bien en plan sexual, sin llegar a penetración. La de veces que sentí morbo e excitación por situaciones, por estimular zonas menos explotadas, y más cosas que no me vienen ahora a la mente. Dentro de ese juego, me gusta ver a la pareja satisfaciéndose. Me excita. Hasta incluso, muy pocas veces, dar ‘ordenes’ para que se hagan entre ellos. Me gusta darles placer a él y a ella (si es ‘bi’ y me había gustado. Algunas veces hice tríos siendo ella ‘hetero’ o no nos gustábamos) Me siento dentro del juego. Un encuentro entre tres personas en que la decisión de los tres importó. Repetir con esa pareja con la que tuve ya un encuentro sexual, y sin prisas, disfrutando de cada momento, es excitante y divertido para mí, y seguir repitiendo más. Crea un vinculo de complicidad enorme!
Intento siempre disfrutar del mundo liberal, me involucro en los encuentros, porque me siento dentro del juego. 
Siempre he creído en el mundillo desde que lo conocí, y lo sigo creyendo pero como muy buen complemento.